jueves, 28 de mayo de 2009


Si tu objetivo era destruirme, lo lograste, sino lo era me paso.. No sé cómo pude fijarme en alguien como vos, pensaba que eras el chico ideal, pero me equivoque. Detrás de esos ojos no hay más que un simple pendejo que le importa poco los sentimientos de uno y juega con estos. Un día esta con ella, otro día se pelea y aprovecha y se divierte con una estúpida que se hace ilusiones en vano. Después vuelve con la que fue su amor, y abandona a la que fue su muñeca. Pero es una muñeca con sentimientos y corazón, y siente todo el dolor por dentro. Ve cosas que no le gusta ver , se entera de cosas que no le gustaría enterarse .Se entera por terceros y no por él. Y ella cae y se vuelve a levantar y a él ya nada le importa. Casi ya ni recuerda, pero ella no puede olvidar aquella noche. Esa noche fría, enganchada como una nena de 10 años no paraba de pensar en el. Hablaba todo el tiempo de él, recordaba a cada instante ese momento que para ella había sido mágico. Pero todo eso tan maravilloso se transformo en tormentoso y para él, para el...Solo un recuerdo, quizás ya borrado de su mente. No se pude decir del corazón porque nunca lo sintió. Pero ella sí que lo sintió, lo sintió más de lo que debía sentirlo. Por eso es que todo lo que paso le dolió tanto. Nadie la entiende, parece un capricho o una obsesión, pero solo ella sabe lo que le pasa y lo que la lastima ver escritas esas demostraciones de amor como si nada hubiera pasado. Ahora lo único que queda es pasar de página y olvidar por completo las cosas que la hieren. Esa nueva página dejarla en blanco para que cuando algún otro llegue comience a escribir una historia junto a ella, sin lastimarla. Sin causarle ilusiones, esas que duelen tanto adentro que es imposible curar. Las ilusiones es lo primero que uno construye y así es como lo primero que se destruye, desilusionan, entristecen, te hacen sentir que no vales nada, que solo perdiste el tiempo.

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